Slide 1: pauta nº3
Slide 2: Lejos, el reloj de cuco marcaba una hora de la tarde
y, sin saber como ni que,
la caja de música desgranaba un gracioso minué.
Medio aparté las telarañas y… cansado,
me senté en un rincón del desván.
Allí, entre muchos otros tesoros de niño,
cubierto de polvo y olvido,
encontré un pequeño caramillo. Desconocía esta memoria
Desconocía su motivo
De él nada sabía
Slide 3: Soplé con todas mis fuerzas
y sonó un agudo y largo silbidito.
Todo seguía igual,
y es que…, que queréis!,
secretamente esperaba el portento.
Entonces
como preso de la chanza en un dibujo cubista,.
mis primeros ojos no vieron,
pero en cambio, los segundos y terceros
que en el atónito de mi, brotaronme después,
ya lo creo que miraron y por todas partes vieron
Pronto iba a quedar contento
Slide 4: Ay!, la luz de las estrellas se volvió del lado inverso,
estallaron en mis manos, todas las mitologías,
las banderas se tiñeron de pájaros de alas desvanecidas
y las palabras soplaron un silencio
que derribó mis pobres muros de paja.
Se fueron estas viejas mentiras
que se cuenta el hombre a si mismo,
y oí que todo era hijo del temor.
No mas, no mas…, la Trinidad con su pan y con su pez,
se encerró tras de si y... no quedó nada,
coloqué un tapón de corcho y lo lancé a la mar,
su recuerdo, sólo vagamente perduró
en estas entrañables canciones de niñez
que poco a poco, vas perdiendo.
Slide 5: Fui hombre, y.... entonces, ya no jugué más.
Aprendí la lectura de los signos cabalísticos,
no decían nada.
Miré por detrás de mi sueño,
y no vi nada.
Desde allí, también miré hacia aquí
y tampoco vi nada.
Ensombrecido, pude contemplar mi patética figura
arañando la pared encalada de un antiguo muro
Slide 6: No eran realidad, ni el antes, ni el ahora, ni el después
ni el arriba, ni el abajo,
ni el gesto, ni el anti,
yo tampoco existo.
Me vi en un sueño, como escondiendo la ausencia.
Sentí el frió del no ser
avanzando en punta por el metacarpo
Me vi desvanecer
Me vi............caer Comprendí que ya no había términos medios
y escuché el galope del todo
que venía montado en un corcel.
Me sentí limitado
y también, si entonces también tuve miedo
Cegado por la luz del alba,
fui débil y pedí la celosía.
Slide 7: Entonces soplé con todas mis fuerzas,
de nuevo, el caramillo.
Otra vez sonó un agudo y largo silbidito
y a la inversa, todo se trocó en normal. - Normal? - No, no del todo,
pues ahora ya sabia que soplando el caramillo… - He, he! Eres un pillín redomado, verdad? - Todo fue muchísimo peor - ...........? - y salí corriendo del desván
bajando a trompicones las escaleras
al encuentro de la vida. Ramon (1962)